Esa mancha quedará allí al igual que tu máscara |
Se miraba del derecho y del revés, de arriba, hacia abajo, como si se buscara. Sin darse cuenta que allí estaba, justo frente a él...
De tanto mirarse y alabar su tan maquillado rostro, descubrió una mancha, pensó que era algo en su cara. Se acercó desesperado al espejo, tratando de tapar esa mancha que arruinaba su perfecta máscara, perdón su maquillaje, miró una y otra vez la mancha, la horrible mancha intentando encontrarla, pero en su bello y cubierto rostro no estaba... La mancha estaba en su espejo, en su inmaculado espejo, que todo lo refleja, al único que no podía engañar.
Esa mancha lo mantuvo años allí, mirándola intentando quitarla...y aún no lo ha logrado, y sigue cubriendo su rostro con distintos maquillajes.
7 comentarios:
Muy interesante la historia.
¿Qué imagen damos de nosotros mismos? ¿Cómo nos vemos y cómo nos ve el mundo?
Me quedo pensando...
Abrazo!
Un enigmático relato... Besos.
Muy buen relato, es para pensar mucho.
La imagen que el espejo nos devuelve es realmente nuestra imagen o la que queremos que el mundo vea??? Somos realmente esa imagen perfecta e inmaculada que queremos que todos vean o somos simplemente eso q tanto ocultamos, pequeñas manchas que nos hacen ser mas nosotros.
Besotes, Rulis
La belleza exterior no lo es todo.
Muy buen relato, me ha dejado una enorme reflexión.
Saludos!
Como siempre, un placer haberme pasado de nuevo por tu casa. Pasa un buen fin de semana.
Saludos y un abrazo.
Muy filosofico,magico, agri dulce.
un besico
El espejo del alma...
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